Ya te hemos platicado sobre nuestra experiencia Saborista y lo que la hace única. Ahora te compartimos un poco acerca de cada integrante de nuestro equipo para que sepas quiénes hacen de Sabores México una realidad.

Graze Ballado, anfitriona saborista

Después de haber estudiado Administración de empresas turísticas, Graze se dio cuenta de que lo suyo eran los viajes y las experiencias gastronómicas. En Sabores México ha encontrado un espacio para compartir su gusto por México y su comida a través de risas, historias y vivencias. 

Platillo y bebida mexicana preferidos: la cochinita pibil y el pulque curado.

Pasatiempo: jugar tochito bandera.

Tour saborista predilecto: ¡Todos! Cada uno tiene algo especial y que enamora.

Sofía Medina, anfitriona saborista

Sofía estudió la Licenciatura en Filosofía y es amante de la naturaleza y la gastronomía mexicana. Gracias a las propuestas únicas y locales de Sabores México ha podido compartir su amor por la comida con turistas y foodies locales.

Platillo y bebida mexicana preferidos: las enmoladas, el tequila y el chocolate caliente.

Pasatiempo: hacer hiking, correr, leer y escribir.

Tour saborista predilecto: Colonia Roma Food Tour

Raquel Massry, anfitriona saborista

Raquel también estudió la Licenciatura en Filosofía y es amante del buen comer. En Sabores México se ha dado cuenta de que nunca se cansa de caminar por las calles de la Ciudad de México ni de probar su oferta gastronómica, pues en cada recorrido hay siempre algo diferente que lo hace único y le enseña algo nuevo de nuestro país. 

Platillo y bebida mexicana preferidos: los chiles en nogada, el pulque, el tejuino y el tascalate.

Pasatiempo: cocinar, leer y andar en bici.

Tour saborista predilecto: ¡Todos! Ninguno es igual a otro.

Fer Correro, anfitriona saborista

Estudió la Licenciatura en arte dramático y teatro, aunque también cursó un par de semestres de gastronomía y algunos años de medicina. Lo que más disfruta es pasear, conocer gente nueva, platicar y compartir la gastronomía mexicana alrededor de una mesa, gustos que ha reforzado desde que está en Sabores México.

Platillo y bebida mexicana preferidos: el mole, la horchata de arroz y el pozol.

Pasatiempo: bailar y cantar en el karaoke, leer novelas de misterio y cocinar.

Tour saborista predilecto: Colonia Roma Food Tour

Dulce García, saborista Operaciones y Logística

Dulce estudió Administración de Hoteles, pero desde mucho antes tenía una interesante pasión por México y su gastronomía, así como ganas de compartir este amor y acercar los mejores y más auténticos sabores de nuestro país a más personas, algo que ha podido hacer de la mejor manera en Sabores México. 

Platillo y bebida mexicana preferidos: el pozole blanco, los tacos, el agua de horchata y el atole champurrado.

Pasatiempo: leer novelas románticas o de terror y ver películas y series.

Tour saborista predilecto: Centro Histórico Food Tour

Majo Ordóñez, blogger saborista

Además de escribir, lo que más me gusta es comer y descubrir nuevos sabores. Mi formación en Turismo cultural y gastronómico me ha hecho darme cuenta de que compartir la historia de los platillos e ingredientes de México, tal y como lo hace Sabores México, es la mejor forma de conocer nuestra cultura.

Platillo y bebida mexicana preferidos: el mole, las gorditas de chicharrón, los tacos al pastor, el agua de horchata y la tuba

Pasatiempo: bailar, leer, preparar postres y hornear pan.

Tour saborista predilecto: Colonia Roma Food Tour

Rodrigo López, el saborista original

A pesar de ser fotógrafo, su verdadera pasión es la comida, por lo que creó Sabores México para compartir su gusto por los sabores de México y por la oferta gastronómica de la Ciudad de México. Rodrigo se considera a sí mismo como un tragón, pues no hay nada que disfrute más que un platillo con sabores nuevos para su paladar.

Platillo y bebida mexicana preferidos: sopa de tortilla, chicharrón en salsa roja, tacos al pastor, cochinita pibil, pescado zarandeado; tejate, mezcal y tequila.

Pasatiempo favorito: andar en bici, visitar museos y escuchar música.

Tour saborista predilecto: ¡Todos! Cada uno es diferente y ofrece experiencias muy distintas.

Graze, Sofía, Raquel, Majo, Dulce, Fer, y Rodrigo son solo algunas de las personas que integran la familia de Sabores México Food Tours, pero no cabe duda que sin ellos, los food tours, el manejo de redes sociales y el contenido de este blog no serían posibles.

Ahora que nos conoces, puedes estar seguro de que no hay mejores guías para descubrir los sabores auténticos y la historia de la gastronomía mexicana en la Ciudad de México. ¡Anímate a vivir la experiencia Sabores México Food Tours y conviértete en un experimentado saborista! No olvides seguirnos en nuestras redes sociales para que estés al pendiente de nuestros proyectos.

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Aunque en México hay comida deliciosa durante todo el año, nuestro mes patrio destaca por la variada y exquisita oferta de platillos mexicanos que se preparan en casas y restaurantes, pues todo el mundo quiere celebrar el cumpleaños de nuestro país con el mejor sabor en la boca. 

En la Ciudad de México y en algunos otros estados, los platillos típicos para el 15 y 16 de septiembre son el pozole y los chiles en nogada. Sin embargo, muchas familias suelen también preparar mole, tortas, pambazos, tamales y antojitos como sopes, enchiladas y tacos.

Los chiles en nogada

En México se asegura que los chiles en nogada se prepararon por primera vez en 1821 por unas monjas poblanas del Convento de Santa Mónica. Se dice que buscaban sorprender al General Iturbide con un platillo que tuviera los colores de la bandera mexicana. Sin embargo, la receta de estos chiles no se ha encontrado en ningún recetario anterior a 1930, lo que indica que la tan contada historia del origen de este platillo tricolor no es más que un mito. De hecho, ni siquiera hay una receta original, por lo que los chiles pueden ir capeados o no, dependiendo del gusto del cocinero y del consumidor. 

“Esmaltado con granos rubí, traslúcidos y brillantes, un albo manto de nuez casi armiño cubre apenas el verde intenso de los chiles. Al morderlos surge toda la esplendidez barroca del picadillo envuelta en la pulpa carnosa de los chiles y se mezcla golosa, al perfume suave de la salsa de la nogada y al sabor agridulce que encierra como cápsula intacta, cada grano de granada”. – Alfonso Reyes

Los chiles en nogada son un platillo tan rico que muchos no entienden por qué solo se prepara en esta época. Sin embargo, la respuesta está en sus ingredientes. Los chiles poblanos en agosto y septiembre pican menos, por lo que no opacan el sabor del picadillo y la nogada. Por otro lado, el durazno amarillo, la manzana panochera y la pera de leche que se usan para el picadillo son de temporada, al igual que la nuez de Castilla que le da el sabor característico a la nogada y la granada que aporta el toque final.

Ahora que ya conoces más acerca de los sabores presentes en las fiestas mexicanas, aprovecha estos días para aventurarte en la cocina y experimentar el inigualable juego de sabores y texturas de los típicos platillos mexicanos. 

Sigue nuestras redes sociales, Sabores México Food Tours, para que estés al pendiente de nuestros proyectos y sigue nuestro blog para conocer más acerca de la gastronomía y cultura mexicana. Te recomendamos los artículos sobre técnicas culinarias de México y platillos típicos de nuestro país para que aprendas los procedimientos básicos de la cocina mexicana y te inspires a la hora de cocinar.

¡Viva México y buen provecho!

Artículo por: María José Ordóñez Platas

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El 94% de los mexicanos consumimos tortillas diariamente, dándole a esta especie de pan redondeado y cocido el lugar que se merece como parte de nuestra identidad. Normalmente, las tortillas tienen 15 cm de diámetro y se venden por docena; no obstante su forma y tamaño puede variar de acuerdo con el uso que se le vaya a dar. Por ejemplo, las tortillas taqueras son más pequeñas y las que se preparan para hacer huaraches, sopes y flautas suelen tener una forma ovalada y alargada.

Para poder entender lo que hay detrás de este sabroso y versátil alimento, les platicamos un poco acerca de su origen (la milpa), su materia prima (el maíz) y su proceso de elaboración (la nixtamalización). 

La milpa

De acuerdo con Levy-Strauss, estudioso de la cocina como proceso sociocultural, los humanos somos la única especie que transforma a la naturaleza en cultura al cocinar los alimentos. La milpa es una sistema de cultivo que inventaron los nahuas para llevar a otro nivel su relación con la tierra. Este “hábitat del maíz” es mucho más que una tierra de cultivo, pues es un espacio de simbiosis entre plantas y animales. En la milpa, cualquier elemento vegetal o animal que tome ventaja del área se adapta a los siempre presentes cultivos de maíz, frijol, chile y calabaza y se convierte en un insumo alimenticio también. De esta forma, la técnica mesoamericana ofrece una cantidad innumerable de sabores, posibilidades y otorga identidad, haciendo que la relación del hombre con la tierra involucre también a la olla y a los platos que se cocinan con los productos de la milpa. 

El maíz

Para los pobladores de Mesoamérica, el maíz era un símbolo de poder y vida, así como un elemento que conectaba lo terrenal con lo divino. Gracias a la domesticación del teocintle o maíz en estado silvestre, México tiene 59 razas nativas de maíz, cada una con texturas y sabores distintos. No obstante, hoy se importa el 36% del maíz que se consume y se ha homogeneizado la preferencia por el maíz amarillo, lo que hace que la producción de maíz nativo sea casi nula. Por si fuera poco, las variedades de maíz “exóticas” se compran a precios tan bajos que no resulta rentable su producción a pesar de la existencia de una Norma Oficial Mexicana (NOM-187-SSA/SCFI-2002). ¡Hay que hacer algo al respecto!

La nixtamalización

Ahora sí, después de entender de dónde viene el insumo principal para las tortillas, vamos a lo más interesante: el proceso de nixtamalización. El nombre viene del nahuatl nixtli (cal o ceniza) y tamalli (masa de maíz) y se refiere a la técnica que se utiliza para preparar el maíz seco y lograr convertirlo en una masa de tortillas perfecta. Antes que nada, se debe desgranar y limpiar la mazorca de maíz. Luego hay que colocar los granos en una olla y cubrirlos con agua y cal, hervirlos hasta que el hollejo o cáscara se logre desprender y una vez que sea así, reposarlos durante 12 horas. Posteriormente se deben enjuagar los granos con agua limpia hasta que esta salga clara y, por último, se utiliza un metate o un molino para moler los granos húmedos y formar una masa. Una vez lista la masa, se pueden formar las tortillas a mano o con ayuda de una prensa para tortilla, para así colocar sobre un caliente comal y dejar que el calor haga su trabajo.

La magia de la nixtamalización reside en la forma en que la cal y el agua hirviendo promueven reacciones químicas que modifican la naturaleza del maíz, haciéndolo más duradero, más digerible y otorgándole nutrientes.

A pesar de que el proceso de nixtamalización no es complicado, desde la invención de la máquina de tortillas industrial y la harina de maíz preparada, las tortillas han perdido características importantes y muchos mexicanos han olvidado su esencia. Es por esto importante conocer el origen de nuestros alimentos, apoyar a los agricultores fomentando el consumo de maíces regionales y multiculturales, buscar consumir tortillas nixtamalizadas, nutritivas y que reflejen la identidad que nos heredaron las tortilleras mesoamericanas. 

Te invitamos a que apoyes a las pequeñas industrias mexicanas con nuestra iniciativa #ComeLocal, pues entre los exquisitos productos que recibirás, encontrarás tortillas fabricadas por una tortillería mexicana especializada en el producto y que utiliza maíz nativo como insumo. Sigue nuestras redes sociales y nuestro blog, Sabores México Food Tours para estar al pendiente de nuestros proyectos y conocer más sobre la gastronomía mexicana.

Artículo por: María José Ordóñez Platas

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En cualquier lugar del mundo se puede reconocer fácilmente a una mesa con mexicanos. Casi siempre son mesas grandes, con un mínimo 8 personas que no paran de reír, bromear o molestarse entre sí. Normalmente los que rodean la mesa tienen el ojo más grande que el estómago y suelen pedir mucho, pero terminan dejando los platos vacíos, pues todos prueban todo y siempre hay alguien que termina por comerse lo que nadie quiso. Por último, la sobremesa de los mexicanos es muy prolongada, pues las risas se multiplican y el placer de la conversación se hace más fuerte a lo largo del ritual alimenticio, muchas veces acompañada de café y/o tragos que la hacen aún más cómoda y divertida.

A continuación te platicamos sobre algunos elementos que forman parte de la expresión social de nuestra cultura gastronómica y simbolizan la idiosincrasia de México. 

• Diversidad de platillos: A los mexicanos nos encanta tener de dónde escoger, por lo que siempre encontrarás una gran variedad de opciones y guarniciones en los menús. En las fondas, donde solo hay un guiso, siempre va a haber nopales, frijoles, sopa y arroz para que complementes tu platillo.
• Aguas frescas: Las típicas suelen ser de horchata, tamarindo, jamaica o limón con chía, pero simpre hay un “agua del día” preparada con frutas de temporada que te sorprenderá por su dulzor y sabor refrescante que va perfecto con cualquier antojito o platillo que vayas a comer. 
• Tortillas: Antiguamente se utilizaban como cubiertos y en la actualidad se usan para llevar el alimento a la boca o para hacer tacos con lo que se tiene en el plato, por lo que siempre encontrarás un tortillero calientito en la mesa.
• Limón, sal y salsa: Los mexicanos tenemos el paladar muy acostumbrado a la combinación de la acidez del limón con el calor del picante y lo salado del mineral blanco, por lo que solemos ponerle estos tres ingredientes a los caldos, tacos y algunas otras preparaciones, logrando una mezcla ganadora que nos vuelve locos. 
• La familia: Quizá lo más importante de todo el ritual gastronómico de México, pues además de permitirnos ser ruidosos y pasarla bien mientras comemos, nos otorga un espacio para compartir nuestros problemas, éxitos y contar anécdotas. Entonces, como mencionamos al principio, se entiende que una mesa mexicana no es igual sin la presencia de la familia y los amigos.

Ahora que ya conoces un poco más sobre las mesas mexicanas, fíjate bien cuando vayas a comer a una fonda, a un puesto callejero, a la casa de un local o incluso a un elegante restaurante mexicano, pues estamos seguros de que encontrarás al menos uno de estos elementos. Si quieres tener una experiencia más profunda sobre la cultura gastronómica mexicana y buscas aprender más acerca de la convivialidad alrededor de la mesa, te recomendamos hacer alguno de nuestros food walking tours. Puedes encontrar información en nuestra página web o en nuestras redes sociales, Sabores México Food Tours. 

Artículo por: María José Ordóñez Platas

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